De Stalkers que uno arrastra desde la infancia

Todos en la vida hemos tenido a ese conocido de la infancia al que muchos le huyen y que se gana todos los apodos y chalequeos habidos y por haber. Es el que se quedaba malpegado en despechos eternos por la niña linda a la que siempre cortejó, pero que nunca le dio ni la hora del día. Por lo menos le agradecía cortésmente los detalles, aunque luego fuera con sus panas (los ratas de la cuadra pues) a burlarse del dibujo que él le había hecho o de las flores que le había regalado.

Siempre hay quienes abusan de la maldad y se mofan cruelmente de personajes como este. Cuando yo era chama, no tenía esa malicia. Yo era de las que si ser demasiado amigable, trataba al personaje con bastante cortesía, y hasta podría decir comprensión y algo de simpatía. Así hacían otros tantos "buenagente".

Los "buenagente" nunca fuimos capaces de tirarle el teléfono las 3.840.586.284 veces que llamaba. Es más, hasta le atendíamos y escuchábamos... pacientemente.

Mi salvación llegó cuando me mudé, por lo que, obviamente, ya no tendría a donde llamarme. También ayudó el que me fuera a vivir a Guasdualito durante un año, regresé y unos meses después me volví a mudar. Para este momento ya ni recordaba que dos años atrás recibía por lo menos 4 llamadas semanales a horas inoportunas. Safe! Well, not entirely.

a pocos días de regresar de España fui con unos amigos a la celebración del Bicentenario en la plaza LPG, y ahí me encontré con el personaje (traté de esconderme, pero me pilló). Droopy enseguida vino a saludarme y, of course, a pedirme mi número de teléfono. Le dije que no tenía ya que recién llegaba al país. Eso me salvó por unos días de las incesantes llamadas, hasta que me encontró de nuevo. "Ya tienes teléfono?". Justo cuando iba a decir que no la amiga que me acompañaba saltó a decir que sí. Gracias Luisa, siempre te querré!

Desde a la hora y media ya me estaba llamando para invitarme a almorzar, como ya tenía años haciendo. Pensé "let's get it over with", salgo de eso de una. A partir de ese día empezaron los piropos pavosos no solicitados.

Al parecer perdió su teléfono y ahí comenzó el bombardeo por FB: "Hola bella, perdí tu teléfono, me lo pasas de nuevo?". "Amor, será que me puedes mandar tu celular que lo tenía en el otro teléfono y lo perdí?" "Amor"??? El WTF del año! Mijito, que yo no soy, he sido ni seré "amor" tuyo, deja la pavosería!


Ayer vi que tenía una llamada perdida de un número desconocido y un mensaje de voz. Al escuchar el sonido de esa voz al más puro estilo Pitufo Tontín entré en pánico. Me encontró! Esto amerita un momento Delfín Quispe: NO PUEDE SER, NOOOOO! Listo... continuamos.

Era para invitarme a 360 ayer con la supuesta idea de ver a viejos panas, algunos a los que sí que me gustaría ver. What to do, what to do? De ir, la única manera sería acompañada de algún noviecito for the day con el fin de sacudírmelo de una vez. Fue más fácil simplemente no responder la llamada y ni asomarme.

Total que tengo a my own personal stalker que aparece por todos lados sin ser invitado. Supongo que me lo gané por "buenagente". Estoy considerando seriamente mudarme de nuevo y cambiar de número celular. Capaz hasta de operadora.