Cada día que pasa, y sobretodo desde que regresé hace unos meses de Madrid para "reinsertarme" en la zoociedad caraqueña, aunado a mi actual situación de desempleo, (mal)gasto gran parte de mi tiempo tuiteando sobre actualidad, política, fútbol o sobre las boludeces y necedades que me da la gana tuitear. También leo a quién me apetece leer. La verdad es que Twitter da para todo. Yo leo noticias, chistes, reflexiones -útiles o no- y a veces hasta uno que otro RT del Rey Retuitero himself, @NelsonBocaranda.
Por supuesto, también leo a muchos de mis amigos, porque la gran mayoría de ellos tienen algo interesante que decir así sea de vez en cuando. @FabrizioCorner siempre hace buenas recomendaciones musicales. @tukeke me provee de todos los lnks geeks magistralmente ejecutados que me hacen querer olvidarme de la etiqueta de "Abogado" que tengo pegada en la frente y querer dedicarme a una vida más bohemia de dar vueltas por el mundo solo para poder fotografiarlo. Ese lindo daydream se esfuma cuando recuerdo que hace falta tener buen dinero -y una buena cámara- para hacerlo. También está mi adorado Father Tots, a quien muchos conocen simplemente como @totoaguerrevere. A pesar de que lo conozco hace varios años ya, leerlo en Twitter se ha convertido en uno de mis mayores placeres. No puedo con tanta ocurrencia y tanto witt metido en sólo 140 caracteres. Tanto que #yoconfieso que me da un poquito de envidia, porque quisiera que se me ocurrieran esas cosas a mí.
Esa agudeza y genialidad con las palabras le ganaron a Toto que lo nombrara oficialmente mi Number One #twittercrush. Pero yo no me conformo, y un día apareció el hashtag que haría historia y me marcaría para siempre. Sí, ese que ahora tantos repetimos en nuestros timelines: el maravilloso #grasiachiabetqm. Cada vez que aparecen nuevos contenedores de comida podrida, que hay un corte de luz, que aprueban alguna ley absurda, que Chávez dice una de sus habituales barrabasadas o que algún Ministro o diputado le echa la culpa de todo lo que hacen mal a la CIA, a una iguana comecables o a Paul el Pulpo vidente, amerita que le demos las gracias a nuestro querido (NOT) Presidente por todo lo que padecemos.
Es así como aparece mi segundo #twittercrush, que con sólo ese gesto de agradecimiento al Comandante, se ganó mi corazón twittero: @Esparzari. Aunque no es el autor #grasiachiabetqm, es quien lo dio a conocer, y, además, quien me mató de risa todas y cada una de las veces que lo escribió. Obviamente que yo a este personaje lo tenía que conocer a como diera lugar. Tenía que darle un abrazo, o por lo menos darle la mano... Y lo hice! Instantáneamente nos dimos el respectivo abrazo y nos dijimos "Cham@! Qué fin@ eres en 3D!!!"
El Señor @Esparzari ya venía barajeando la idea de hacer unas franelas con el tag impreso en el pecho. Varios secundamos y apoyamos la idea, y por supuesto no lo pensamos antes de decir "¡quiero una!". Ya se lo había advertido a Toto, que estaba a punto de ser desplazado como Number One. Ayer fue definitiva e irrevocablemente desplazado (sorry Tots, you know I love you tons and tons). Ayer en medio del tumulto de gente, el Señor @Esparzari que quitó su franela, quedando momentáneamente semidesnudo ante la mirada atónita de muchos anónimos y me la entregó, haciéndome más feliz que el propio Chiabe con empresa recién expropiada. Y por eso hoy digo: #grasiaEsparzaritqm ♥
Y aquí la prueba del delito: